Midelt es una pequeña y encantadora ciudad situada en el corazón del Alto Atlas en Marruecos, a medio camino entre Fez y Errachidia.
Esta localidad, a menudo pasada por alto por los turistas, ofrece una rica mezcla de cultura, historia y paisajes naturales impresionantes que no deben ser ignorados.
Conocida por su atmósfera apacible y su entorno montañoso, Midelt es un oasis de tranquilidad para quienes buscan alejarse del bullicio de las ciudades más grandes y sumergirse en la auténtica vida marroquí.
En este artículo, exploraremos la historia de Midelt, sus principales atractivos turísticos y sus tradiciones locales, así como consejos para aprovechar al máximo una visita a esta joya escondida.
Historia de Midelt
La historia de Midelt se remonta a tiempos antiguos, cuando tribus beréberes se asentaron en la región.
Estas tribus construyeron pueblos fortificados conocidos como ksour, algunos de los cuales todavía pueden ser visitados hoy en día.
A medida que avanzaba el tiempo, la ciudad experimentó diversas influencias culturales y religiosas, desde el dominio romano hasta la islamización.
En el siglo XX, la llegada del protectorado francés trajo consigo un cambio en la estructura urbana de la ciudad, y muchas de sus edificaciones coloniales aún se mantienen en pie.
Atractivos turísticos
Kasbah Myriem
Uno de los lugares más emblemáticos de Midelt es la Kasbah Myriem, un convento franciscano fundado en 1934.
Este convento ha sido un importante centro de artesanía en la región, donde las monjas enseñan a las mujeres locales técnicas tradicionales de tejido y bordado.
La Kasbah Myriem también alberga un pequeño museo que exhibe una impresionante colección de artefactos religiosos, así como una tienda donde se pueden adquirir piezas de artesanía local.
Parque Nacional de Jbel Ayachi
El Parque Nacional de Jbel Ayachi, ubicado a pocos kilómetros al sur de Midelt, es un destino popular para los amantes del senderismo y la naturaleza.
La montaña Jbel Ayachi, con una altura de 3.747 metros, es el pico más alto del Alto Atlas Central y ofrece un desafío gratificante para los excursionistas experimentados.
El parque también cuenta con numerosos senderos más accesibles para todos los niveles de habilidad, que serpentean a través de hermosos paisajes de montaña, ríos y cascadas.
Minas de minerales
Midelt es conocida por su riqueza en minerales, particularmente por sus minas de plomo y zinc.
La ciudad cuenta con un pequeño pero interesante Museo de Minerales, donde se pueden admirar muestras de minerales locales y aprender sobre la historia de la minería en la región.
También es posible visitar algunas de las minas abandonadas en las afueras de la ciudad, aunque siempre es recomendable hacerlo con un guía local.
Mercado local
El mercado local de Midelt es un hervidero de actividad y un excelente lugar para sumergirse en la vida cotidiana de la ciudad.
Aquí, los visitantes pueden comprar productos frescos, especias, textiles y artesanías típicas de la región. Además, es una oportunidad única para interactuar con los lugareños y aprender sobre sus costumbres y tradiciones.
Ksar Aït Youssef Ou Ali
El Ksar Aït Youssef Ou Ali, ubicado a unos 30 kilómetros al norte de Midelt, es un ejemplo bien conservado de una aldea beréber fortificada.
Este sitio arqueológico cuenta con numerosas casas de barro y piedra, así como una mezquita y un granero comunitario.
Una visita a este lugar permite a los turistas tener una idea de cómo era la vida en esta región antes de la llegada de la modernidad.
Tradición y cultura local
Midelt es un crisol de culturas, donde coexisten armoniosamente las comunidades árabes y beréberes.
La música y la danza son parte integral de la vida local, y es común ver a los lugareños tocando instrumentos tradicionales y participando en danzas folclóricas.
La gastronomía de la región también es digna de mención, con deliciosos platos como el couscous, el tajine y la harira.
Consejos para disfrutar al máximo de Midelt
Contratar un guía local: para aprovechar al máximo su visita a Midelt y sus alrededores, es aconsejable contratar un guía local que conozca bien la zona y pueda mostrarle los lugares de interés fuera de los circuitos turísticos habituales.
Respetar las costumbres locales: al tratarse de una ciudad de carácter más conservador y tradicional, es importante respetar las costumbres y las normas de vestimenta locales, especialmente al visitar lugares religiosos o comunidades rurales.
La mejor época para visitar: aunque Midelt es una ciudad agradable durante todo el año, la primavera y el otoño ofrecen temperaturas más moderadas y menos lluvia, lo que facilita la exploración de sus atractivos naturales.